Hoy le toca el turno a este clásico de clásicos mexicano. Y aunque sé que hace mucho calor, yo simplemente no lo pude evitar. No me odien; es más, si están en la calle asoleados, o molestos en su carro porque el aire acondicionado no se da abasto, cierren la página y vuélvanla a abrir cuando estén en un lugar más fresco. Pero la vuelven a abriiirr... prometo los van a disfrutar.
Sin duda, son la opción perfecta para un menú sin carne. Los frijoles son altamente nutritivos, fuente de proteínas, vitaminas, fibra y minerales, bajos en grasas, calorías y sin colesterol. ¿Les podemos pedir algo más?
Al ser de las
comidas favoritas de mi papá, este platillo se preparaba frecuentemente en casa,
y a mí, como a todos en la infancia, más de una vez me tocó la tarea de
limpiarlos.
Precisamente ahora
que están de vacaciones los niños, ésta es una actividad perfecta para que nos
ayuden en la cocina. O por lo menos, mis hijos se entretienen mucho haciéndolo.
Me da ternura ver como abogan por salvar uno que otro frijolito
de ser desechado. Pero les explico que más allá de hacerlo por quisquillosos, es importante retirar los frijoles quebrados, arrugados o manchados,
porque suelen ser frijoles viejos; los que tienen hoyito, porque “alguien más”
anduvo botaneando por ahí, y desde luego tenemos que desechar todas las
piedritas o basura que pudiera venir entre ellos.
Una vez que los limpiamos, procedemos a lavarlos, y los aventamos a una olla con agua y sal. Y ¡listo! No ocupan más, los frijoles básicamente se cocinan solos y nos dan tiempo suficiente para preparar su acompañamiento. En casa siempre los servimos con arroz rojo y salsa bandera.
Y si lo que no
queremos, es calentar la casa en pleno verano, les tengo la solución. En lugar
de cocinar los frijoles en la estufa, los pondremos en una olla de cocimiento lento
tempranito por la mañana. Yo, por lo general, los pongo a las 9 am, y para la 1
pm ya están listos. Eso sí, es importante poner la olla en la opción HIGH. Ya
que están casi listos, agregamos únicamente sal gruesa, revolvemos y dejamos
que se sigan cocinando hasta estar blanditos.
Los frijoles que nos queden después de comer, los podemos moler y guisar, y así tendremos frijoles refritos para acompañar nuestras comidas el resto de la semana.
Los frijoles que nos queden después de comer, los podemos moler y guisar, y así tendremos frijoles refritos para acompañar nuestras comidas el resto de la semana.
Así que como ven, además
de ser tan nobles y saludables, son súper prácticos y económicos. Déjense conquistar
por los tradicionales Frijolitos de la Olla.
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Frijoles de la olla
Frijoles enteros servidos en su caldo, acompañados con arroz rojo con
elotito, salsa bandera con chile tatemado, rebanadas de aguacate y tiras de
queso panela al gusto.
INGREDIENTES:
Para los frijoles
1 kg de frijol
pinto
5 lts de agua
Sal gruesa de mar
Para el arroz rojo
2 tz de agua
1 tz de arroz
1 diente de ajo
1 cda de cebolla
picada
1 cda de aceite
1 cda de
mantequilla
¼ tz de puré de
tomate
1 cdita de consomé
de pollo en polvo
1 lata chica de
elote (220 gr)
Para la salsa
1 chile verde (Anaheim)
1 tomate
2 cda de cebolla
2 cda de cilantro
Sal de mar
Pimienta
Para servir
Aguacate
Queso panela o
fresco
PROCEDIMIENTO:
Para los frijoles
1. Vaciamos los
frijoles sobre nuestra mesada y comenzamos a limpiarlos, retirando las piedras,
basura o frijoles quebrados que nos encontremos. Vamos pasando los frijoles
limpios a un colador, y una vez que terminemos con todos, los enjuagamos bajo
el chorro del agua revolviendo con ayuda de nuestra mano, hasta que el agua
salga limpia.
2. Agregamos los
frijoles y el agua a una olla express, añadimos la sal, y colocamos la tapadera
de la olla y su válvula. Nos cercioramos de que esté bien cerrada. Ponemos a
fuego alto y una vez que la válvula comience a hacer ruido, reducimos al fuego
más bajo. A partir de este punto, cocinaremos por 45 minutos. Una vez pasado el
tiempo, apagamos el fuego y dejamos reposar la olla hasta que su presión se
reduzca. Nos daremos cuenta de ello cuando baje el botón indicador de presión
que esté en la tapa. Abrimos con cuidado la olla, revolvemos un poco los
frijoles y rectificamos sazón. De hacer falta sal, agregamos la necesaria y
dejamos hervir, sin tapadera, por 10 minutos más.
Para el arroz rojo
3. Mientras se
cocinan los frijoles, prepararemos el arroz. En una olla pequeña, ponemos el
agua a hervir. Vaciamos el arroz en un colador y lo lavamos bajo el chorro del
agua, hasta que esta salga completamente transparente. Picamos finamente el ajo
y la cebolla. Escurrimos la lata de elote.
4. Calentamos una olla
mediana a fuego medio/alto y agregamos el aceite y la mantequilla. Una vez
derretida, añadimos la cebolla y el ajo y acitronamos por 1 minuto. Agregamos
el arroz y revolvemos con ayuda de una palita de madera hasta dorarlo bien.
Vamos a ir notando que todos los granitos van cambiando de aspecto y al moverlos
hacen un ruido más seco. Añadimos el puré de tomate e integramos perfectamente.
Vaciamos el agua hirviendo, agregamos un toquecito de consomé de pollo en polvo
y el elote ya escurrido. Ponemos el fuego a lo más bajo posible y tapamos. NO
debemos de estar abriendo el arroz. A los 15-18 minutos nos podemos asomar a
comprobar que ya esté. Debe de estar esponjado y sin líquido. Apagamos el fuego
y dejamos tapado hasta servir.
Para la salsa
5. Lavamos toda la
verdura. Barnizamos el chile verde con un poco de aceite. Los ponemos a tatemar
en un comal o en una rejilla directo en el fuego, dando vuelta por cada lado y
cuidando que no se queme. Una vez listo, lo envolvemos en una servilleta de
cocina y lo metemos en una bolsa de plástico para que sude. Esperamos 5 minutos
y después podremos retirar la piel fácilmente. Retiramos el tallo y las
semillas, cortamos en tiras a lo largo del chile y a su vez, éstas en
cuadritos.
6. Cortamos el
tomate en cubos chicos, y picamos finamente la cebolla y el cilantro. Agregamos
toda la verdura a un tazón, integramos y salpimentamos al gusto.
Para servir
7. Cortamos el
aguacate en rebanadas, y el queso panela en tiras o desmoronado.
8. En un plato
profundo, servimos una porción de frijoles con suficiente caldo, colocamos un
poco de arroz encima, salsa al gusto y decoramos con rebanadas de aguacate y
tiras de queso.
Notas:
- NUNCA debemos de abrir la olla de presión mientras la tapa siga sellada.
- Si tenemos prisa, podemos poner la olla bajo el chorro de agua en el sink para que enfríe mas rápido y se reduzca la presión. No debemos de poner el chorro sobre la válvula.
- Si no tenemos olla express, los podemos hacer en olla regular pero se dejarán cociendo por 2 horas, y la sal se agrega en la última media hora de cocción.
- Una opción para el verano, para no calentar la casa, es poner a cocer los frijoles en olla lenta. Yo lo que hago es ponerlos a cocer a primera hora en la mañana, en la opción HIGH, y en 4 horas los frijoles están suaves y cocidos perfectamente. Si los preparamos de esta manera, añadiremos la sal media hora antes de que estén listos.
- Yo no acostumbro remojar los frijoles, porque tienden a desbaratarse con más facilidad.
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¡Y ahora sí! a
disfrutar de este delicioso manjar mexicano. =)
¡Besos!